-Ñañaña.
Me coje de la cintura, me mira a los ojos, me sonríe y me da un beso.
-Hay tontito- Digo sonriéndole [Rebeca,xD]
-Ahora soy yo el que digo ñañaña.
Nos reimos a la vez.
-Ven,ven,ven.
-Qué,qué,qué-
Me acerco un poquito y le doy un beso.
-Mmm, me ha gustado el beso.
-Y a mí...me gusta cómo besas.
-Beso bien, porque tú besas bien.
-Yo creo que ésto es viceversa.
-Yo creo que no.
-¿Por qué?
-No sé, pero creo, simplemente,, que besas genial.
-Tú también.
-Vaah, puede ser...¿Pero sabes qué?
-Mmm, no, no sé.
-Boba...nunca he visto a una chica con esos labios tan bonitos.
-Emm, son normales.
¿Bromeas?
-En absoluto. ¿A ver, que tienen de especial?
-Pues, que son rositas, marcados..y carnosos..
-Pssh, pues eso, nada en especial- Me río.
-Ya, claro...
-No seas bobo, ojos preciosos- Le digo mientras le cojo la cara suavemente, y le doy un beso...largo, y...dulce.
-¡Buuh, ven, corre!- Dice mientras me coje de la mano.
-¿A dónde?
-Tú corre.
Comenzamos a correr, y llegamos a un parquecito, con mucho campo verde, y árboles quedaban sombre, perfecto, para tumbarse...y hablar tranquílamente.
-Siempre me ha gustado éste sitio.
-Es muy bonito, y creo...que alguna vez, sí que te he vito por aquí.
-Ala, ¿enserio?
-Sí, pero...estoy en duda..[u.u]
-Mmm, no sé, uo suelo pasear por aquí con mi perra.
-Pues...sí que te he visto, ¿era negra?
-Sí.
-Me fijé en tí...desde entonces...Y, encima, te ví en la cafetería.
-¿Crees que ésto es cosa del destino?
-No lo sé...puede que sí...Igual es una señal...sí...
-Pues ésta señal me gusta...-Digo sonriéndole, y cogiéndole de la mano. [:)]
-Y a mí. Venga vámonos.-También sonríe.
Seguimos andando, y, empezamos a subir unas escaleras bastante anchas. Llegamos al mirador...y éste abre la puerta del restaurante.
-Las damas primero.
-Gracias.-Los dos sonreímos.
Es muy amplio, y tiene grandes ventanales que dan a la playa.
-¡Por fin, ya habeís llegado!- Dice un hombre gordito, y con una sonrisa en la boca.
-Hola Carlo, nos hemos atrasado un poco...lo siento.
-¿Un poco? ¡Media hora! Pero no pasa nada, venir por aquí, os acompaño a vuestra mesa.
-Muchas gracias, ven Paula.
Cruzamos una puertita, que nos conduce a una terraza trasera, con una mesa preparada, sombrillas...el olor a mar, el sonido de las olas romper, las conchas por la arena caliente...
-Bueno chicos, ésta es vuestra mesa, ahí teneis la carta, elegís la comida, y en seguida vengo a tomaros nota.
-Muchas gracias -Decimos a la vez.
-Ven señorita, que le acerco la silla.
-Gracias caballero-Digo, mientras me siento.
-De nada, ¿Te gusta éste lugar?
-Me encanta, creo que es perfecto.
-Me alegro, pero...se me ha olvidado algo.
¿El qué?
-Espera, ahora vengo.
Al de unos minutos, vuelve con una gran rosa roja.
-Ésto era lo que me faltaba.
-¡Qué bonita! Pero no hacía falta enserio...muchas gracias...Jo, es preciosa.
-Como tú.
-No, es más bonita la rosa. [xD]
-Bueno, vale...tal vez sí...pero no me gusta enamorarme de flores...prefiero a las personas...
-¡Qué bobo!- Digo riéndome.
-Ya ves...-Dice poniendo su mano encima de la mía.
Miro a la carta sonriendo, mientras observo los diferentes platos de comida que hay para elegir.
-Ya sé qué voy a comer.
-¿Sí, tan rápido?
-Sí, he escogido la ensalada de pasta...¿y, tú?
-Pues yo...mmm.... mira, también, ensalada de pasta.
-Perfecto [:)]
Después de unos minutos aparece Carlo, con una libretita en la mano, andando alegremente.
-Hola chicos, ¿ya habéis elegido?
-Sí, dos ensaladas de pasta- Dice Daniel.
-Muy bien, ¿Y de beber?
-Yo quiero un zumo de naranja.-Digo sonriente.
-Y yo...una Coca-cola.
-Está bien, pues dos ensaladas de pasta, un zumo de naranja, y...una Coca-cola. ¿Así?
-Sí, muchas gracias.
-Bueno, pues dentro de nada, os sirvo la comida
Y se marcha.
-Luego, podríamos ir a la playa.
-Sí, ¿Por qué no? Pero...no tengo bikini.
-No pasa nada, podemos comprar uno.
-No hace falta, vámos a mi casa en un momento.
-Venga tonta, que te lo compro, así te acuerdas de mí.
-Vaah...si quieres... pero que sepas que no necesito un bikini para acordarme de ti.
-Ooh, guai, pero te lo compro eeh.
-Vale, vale.
-¿Sabes que quiero ahora?
-¿Qué quieres? A ver, dime.
-Un beso...
-Aamm...y...¿De quién?
-No sé...De alguien que su nombre empieza por Da y termina por niel.
Se empieza a reir.
-Pues no caigo quién es.
-Igual te lo he puesto un poco dificil...a ver...empieza por Dan y termina por iel.
-Mmm, ¿Dan e iel?
-Sí.
-Dan e iel...mmm...espera...creo que lo tengo, mmm ¿Daniel?
-¡Acertaste!
-Woow, pero me voy a poner un poco celoso, ¿Qué Daniel?
-El que tengo enfrente.
-¿Sabes? Yo me llamo Daniel...
-Algo he oído...
-Jou, ¿me podrías dar el beso a mí?
-Si insistes...[:)]
Me levanto de la silla, y me acerco lentamente a Daniel, y le beso.
-Mejor dártelo a tí, que al otro ¿no?
-Síí, además yo soy más guapo.
-Alaa, exagerado...-Digo mientras me río.
-Pero, ¿es verdad, no?
-Sii[:)]
Y él me besa. Después, regreso a mi silla.
Aparece Carlo con dos enormes platos, llenos de ensalada.
-Espero que os guste, que aproveche-Dice con una sonrisa, mientras deja los platos y la bebida.
-Muchas gracias, decimos a la vez.
-¡Qué pinta tiene!
-Sí, la verdad es que sí, es un gran cocinero.
-Por supuesto, ésto está muy bueno.
-Me alegro de que te guste.-Sonríe.
-Pasa las horas, hablan, hablan ríen, se tiran migas de pan...Es casi como la primera vez, pierden la noción del tiempo.
Daniel se levanta de la silla, y extiende la mano hacia Paula, ésta la coge. Salen de aquel moderno restaurante, y bajan a la playa, y comienzan a caminar tranquilamente por la orilla. El agua está fresca, digamos que perfecta para un día caluroso de verano.
Sin darse cuenta, han empezado una historia... ¿De qué tipo? Creo que se sabe perfectamente. Sólo se conocen de hace dos días, pero el amor es rápido, y no te das cuenta...También es bonito, y, a veces doloroso...Pero son jóvenes, tienen tiempo, no tienen prisa y tienen que experimentar...Tienen muchas cosas que hacer...
